Oh gloriosa Rosa de Santa María,
bendita virgen y mujer de alma pura,
primera flor de santidad de América,
grande en humildad y llena de caridad,
insigne por la fragancia de tus virtudes
que ardiste en amor a Jesús en la Eucaristía
y sentiste profunda devoción hacia María Santísima
se nuestra intercesora, aboga ante Ellos los favores divinos
y consíguenos lo que con gran confianza solicitamos.
Santa Rosa de Lima, mujer llena de Dios
entregada y fiel misionera que con tus predicaciones,
con tu oración y tus mortificaciones,
lograste un sinfín de conversiones
que propagaste el rosario con infatigable celo
y fuiste compasiva con los necesitados y oprimidos,
acuérdate de tus fieles devotos y ora por nosotros
cuando nos aflijan las penas, las amarguras y pobrezas.
Bienaventurada Santa Rosa,