Glorioso San Esteban
a ti acudimos llenos de confianza en tu intercesión.
Nos sentimos atraídos a ti
con una especial devoción,
y sabemos que nuestras súplicas
serán más agradables a Dios nuestro Señor,
si tú que tan amado eres de el se las presentáis.
Tu caridad, reflejo admirable de la de Dios,
te inclina a socorrer toda miseria,
a consolar toda pena y a complacer
todo deseo y necesidad,
si ello ha de ser en provecho de nuestra alma.
Mira pues nuestras miserias y penas,
nuestros trabajos y necesidades,
nuestros buenos deseos,