¡Oh glorioso padre San Benito!.
Fervoroso y ejemplar abad,
Mi gran protector bondadoso,
Y de cuantos van a ti a suplicar,
Aleja de mi cualquier influencia maligna,
Todo mal y enemigo,
Y libérame de los peligros del alma, y cuerpo.
Intercede por mí ante el Señor.
Para que alivie mis sufrimientos,
Y las serias dificultades por las que paso,
Aparta, condena, y rechaza,
Por la poderosa intercesión de la Cruz,
Toda mala persona, y toda malicia,
Que puedan dirigir contra mi persona,
Contra mí familia, y mis allegados,
Líbrame de fatídicas herejías,
De magias, conjuros, y hechicerías,
Aleja de mi persona todo enemigo