Madre de los enfermos y
patrona de los enfermeros,
médicos y hospitales.
¡Virgen de los Remedios!
Madre de los enfermos,
te invoco en esta hora de dolor y de enfermedad.
Que tu caricia y consuelo
de Madre me sostengan
para que reconfortado/a
pueda superar este momento de sufrimiento.
Que tu amor me ayude a asociarme
a la Pasión de tu Hijo
y así pueda confiar
en la eficacia del dolor
para la salvación del mundo.
Amén.